CALAFATE
Aterrizamos en la ciudad de Calafate. A muchos kilómetros de la civilización. Para llegar a la ciudad hay autobuses que te llevan por un precio razonable. Una vez en Calafate, nos dirigimos hacia el centro a buscar alojamiento. Después de unas cuántas preguntas a los locales, terminamos en un hostal llamado «blabla», tenía un jardín a las afueras y estaba lleno de animales, perros, gatos, conejos… Eso nos encantó y entramos, acertamos de pleno. El sitio es limpio y bonito, está suficientemente alejado del centro como para estar tranquilos y lo suficientemente cerca para llegar en 10 minutos andando. Nos acomodamos, dejamos las mochilas y nos fuimos a conocer el pueblo.
LA PLANTA DE CALAFATE
Calafate es una planta que solo sale en la Patagonia Argentina y Chilena. Tiene unos frutos comestibles con los cuales se puede hacer todo tipo de productos. Licor, mermelada, helado, té… Está realmente rico, sabe parecido a mezclar una mora y un arándano, pero más dulce. Si te animas a ir a la Patagonia, no te puedes perder estos productos y llevarte algunos para casa de recuerdo, ya que no los encontrarás en ningún otro lugar.
Calafate es una planta con fruto comestible con el que se puede hacer licor, mermelada, helado y té, entre otros productos.
Una vez en la ciudad
Encontramos un mercado metido en una de las callejuelas, tenía un montón de tiendas diferentes, ¡Y nos llevamos un mate hecho de calabaza! La entrada al mercadillo era realmente bonita, con un montón de perros tirados por las calles descansando y muchas figuras diferentes para entretenerse sacando fotos.
Después de nuestro paseo, fuimos a averiguar por lo que de verdad nos moríamos ganas de hacer. ¡Una ruta por el perito moreno! Os lo cuento en una entrada diferente porque ha sido el sitio más espectacular que he visitado en mi vida. Un día por el perito moreno.
GLACIOBAR
Mientras tanto, conocer el Glaciobar ha sido muy divertido. Te meten en un bar a -17º, solo puedes estar dentro media hora. Todo está construido con hielo, ¡ Y hay barra libre! Te dan un vaso de hielo, una capa para soportar el frío y unos guantes. Hay estatuas de hielo, asientos y luces de colores. Solo dejan entrar a ocho personas por vez. Pero es pequeño así que está bastante lleno.
INFORMACIÓN ESENCIAL
– Hay autobuses que te llevan hasta la entrada y te recogen, el servicio es «gratuito» ya que lo pagas con la entrada.
– Los alrededores del lugar son bastante bonitos, está alejado de la ciudad y puedes empezar a ver algo de naturaleza (fotografía principal).
– El precio es de 50 pesos argentinos por persona. Te incluye la entrada, el autobús y la barra libre. El tiempo total entre salir de Calafate y volver a llegar fue de unas dos horas. Lo que es ideal para poder ver el pueblo por la mañana y pasarte allí la tarde.